Leemos y escuchamos mucho Darma pero no vigilamos nuestra propia negatividad sino los defectos de los demás, “este ha hecho algo mal”, “el otro se comporta mal”. En Tíbet existe un refrán similar al nuestro “ver la paja en el ojo ajeno y no ver la viga en el propio” y es: “Nuestros errores que son tan grandes como un yak no los vemos, pero sí los errores de los demás que son tan pequeños como una hormiga.” Pero esto no es practicar Darma, pues así los propios engaños no disminuyen.

Para practicar el adiestramiento mental necesitamos de un maestro que nos guíe y apoye para poder avanzar y no dejarnos desmoronar o abandonarlo cuando los resultados que obtenemos no son los que esperábamos. Algo así sería un grave error porque en realidad nuestra mente posee la semilla de la Iluminación y eso tenemos que tenerlo siempre muy claro y presente. Nuestro ejemplo deben ser siempre los budas del pasado, quienes también en un principio fueron seres ordinarios como nosotros antes de comenzar a adiestrar su mente y a pesar de las dificultades al final llegaron a su meta, la Iluminación.

Necesitamos pues una mente fuerte y estable, eso junto con la guía de un maestro cualificado hará que estemos en condiciones de discernir con claridad qué mentes negativas hemos de abandonar y qué mentes positivas hemos de adoptar. En este proceso es importante que también tengamos compasión hacia nosotros mismos. De la misma manera que los padres a veces llevados por la compasión tienen que castigar o reñir a sus hijos para poder educarlos y llevarlos a desarrollar su mente positivamente, también nosotros tenemos que vigilar la mente con esa actitud para corregirla.

Cuando surgen engaños como el odio, el enfado, la ignorancia etc. debemos pensar que es debido a ellos por lo que no hemos podido salir aún de la existencia cíclica y alcanzar el estado de la Iluminación o la liberación. Ellos tienen el control de nuestra mente y debido a su dominio sobre nosotros estamos siempre creando acciones negativas, las cuales a su vez producen la experiencia del sufrimiento. Hemos de pensar así e intentar poner las fuerzas oponentes para enfrentarnos a los engaños y verlos como si fueran realmente nuestro peor enemigo.

Ven. Gueshe Tenzing Tamding

Las enseñanzas de Los ocho versos de adiestramiento mental de Lang Ri Dhampa son una invitación a descubrir la riqueza que hay en el fondo de todos y cada uno de nosotros y que nos hace iguales al resto de los demás seres. En este sentido, cada uno de sus versos constituyen una profunda práctica de meditación gracias a la cual recibimos las herramientas necesarias para poder transformar nuestra actitud egocéntrica habitual, basada en concepciones erróneas y emociones negativas, en el combustible necesario que nos lleve a alcanzar la mente del despertar y de la bondad incondicional.

www.fundacionchusuptsang.org (Monasterio Chu Sup Tsang . Universidad Budista en Galicia, España)

www.gandenchoeling.com (Centro «raíz» en Menorca, fundado por el Maestro de nuestro Maestro, Khen Rimpoche, hace casi 30 años en Ciutadella de Menorca, Illes Balears, España